En el Día del Tannat, las cuatro caras de una misma uva
Rosado, espumoso, tinto y licoroso son cuatro tipos de vinos elaborados con la variedad tinta que Pascual Harriague supo cultivar con éxito en La Caballada (Salto) hace unos 150 años y que luego se extendiera a otras regiones del Uruguay.
El viñedo uruguayo está cultivado en la actualidad con 27,6 % de la variedad Tannat. Eso quiere decir que esta vinífera se cuenta como la principal presente en volumen cultivado en nuestro país, destacándose inclusive como mayoritaria en cantidad de hectáreas cultivadas en 10 de los 16 departamentos en los que se practica la viticultura.
Hablando del vino obtenido con esta variedad, la imagen que casi siempre viene a la mente es la de un tinto recio, de mucho color, potente en boca, robusto, y hasta algunas veces un tanto áspero. Y es que esa imagen se ajusta bastante a lo que las bodegas obtenían del Tannat hasta no hace mucho más que un par de décadas atrás.
Afortunadamente los técnicos (tanto en campo como en bodega) han aprendido a pedirle al Tannat menor cantidad de kilos en el viñedo, a exigir fruta más madura más allá de las condiciones climáticas que pueda presentar una vendimia, y a cuidar luego esa fruta en la bodega, donde maceraciones no tan largas, crianzas en buenas barricas, y un manejo adecuado durante todo el proceso de vinificación, hace que los modernos vinos Tannat se puedan beber inclusive el mismo año en que fueron producidos.
Pero separar la imagen del Tannat tinto clásico del de otras vinificaciones, parecería ser un desafío que aún llevará años de trabajo por delante. Apenas un puñado de consumidores entrenados conocen hoy en día que hablar de Tannat no es solo hablar de vino tinto, sino que otras opciones se cuentan entre las que ofrecen los vinos elaborados con la "uva bandera" uruguaya.
Vaya a modo de ejemplo esta selección de cinco etiquetas que perfectamente podrían armonizar un menú de cena desde la bienvenida hasta el postre, con cinco etiquetas que valen mucho la pena ser descubiertas. Etiquetas que, una vez la emergencia sanitaria nos de una tregua, serviremos a la mesa de un reducido grupo de amantes de la buena vida que se permitan la oportunidad de disfrutar apreciando las cuatro caras de una misma uva....
Narbona Tannat Rosé
De esos rosados que sorprenden por su atractivo color rojo cereza muy brillante. Su perfume nos recuerda a las pequeñas frutas silvestres (moras, frambuesas) mostrándose en boca con un interesante volumen, algo goloso, pero bien equilibrado con la acidez que le otorga largo en el paladar. Para beber en el entorno de los 10 grados, acompañando boniato al rescoldo con miel de ajo, cremoso de queso azul y menta.
Pisano Brut Nature "Negro" Tannat
Servirlo en la copa y contemplar su espuma violácea despierta los sentidos. Es uno de los poquísimo, sino el único espumoso natural elaborado en tinto con Tannat y a través del método tradicional. Intenso perfume a frutas rojas y especias, boca de volumen medio, compleja y fresca a la vez, de grato recuerdo varietal. Sorprende con muchas comidas, pero deslumbra cuando es acompañado de un taco de entraña marinada en especias, con mojo rojo y toque de yema curada.
Bracco Bosca Criado en Tinaja Tannat
Un Tannat ejemplar si tenemos que hablar de un tinto elegante, de esos que no van por el lado de lo contundente, sino de lo sutil. Lindísimo color y fruta exótica en la nariz que causa efecto de enamoramiento a primera vista. Ya en la boca se exhibe sensual y seductor, con expresión frutal que encanta, taninos bien pulidos y una mineralidad extraordinaria. Lo probamos con un risotto negro con variedad de hongos, con el que casó de maravillas.
Montes Toscanini Gran Tannat Premium
Aquí sí es donde la potencia de un Tannat con alta concentración se hace notorio. Sin embrago, el gran trabajo del enólogo - que supo manejar muy bien los taninos durante elaboración y crianza - logra que un vino robusto como este, sea apetitoso y disfrutable aún siendo joven. Rojo con reflejos violáceos, excelente expresión frutal que se amalgama con el roble, y de largas caudalías en el paladar. Armoniza muy bien con bife ancho sobre espejo de salsa Tannat y sócalo de polenta relleno de queso parmesano.
Tomasi Licor de Tannat
Y si de acompañar un menú completo se trata, no puede faltar la versión del Tannat licoroso junto al postre. Color rojo muy intenso, perfume de ciruelas y uvas pasas, especias y chocolate, con ataque dulce que es equilibrado por la acidez. Ideal para beber frío (en el entorno de los 10 grados) y maridar con texturas de chocolate.
Texto: Sommelier Daniel Arraspide