Un finde de disfrute ideal en Carmelo y sus cercanías (1)

El silencio que solo es interrumpido por el canto de las aves, el paisaje que transmite paz y serenidad, y el perfume a comida elaborada con los mejores ingredientes, son solo el comienzo que tienta los sentidos. Si te atreves a aventurarte un poquito más, te verás rodeado por el buen gusto de los vinos producidos en las bodegas locales, que como el terciopelo acarician y seducen, además de contar historias que involucran a los lugareños, pilar fundamental que nos lleva a elegir Carmelo como destino de muy buen nivel turístico en Uruguay.

Partiendo de Montevideo el sábado sobre las 8 de la mañana, la ruta nos lleva hasta Bodega Zubizarreta, una empresa de perfil netamente familiar que en su ADN hace lucir sus raíces vascas e italianas. Son las 10:30 cuando la siempre simpática y muy receptiva Mariela Zubizarreta nos da la bienvenida. Otras tres parejas bajan de una mini van, llegando para sumarse al recorrido que en minutos iniciaremos por el establecimiento. Allí se levanta - luciendo muy bien preservada - la "Casa de Aitona" (Casa del Abuelo en lengua euskera) dando testimonio de que ofició como residencia familiar para quienes vienen elaborando vinos desde el año 1957, y que hoy en día puede ser elegida como hospedaje exclusivo.

Entre grandes piletas de hormigón con ilustraciones que narran la historia del lugar, pequeños tanques donde se elaboran vinos finos en partidas limitadas, y un viñedo tan prolijo que a más de un empresario del sector le genera "envidia sana", transcurre la visita. Pero por sobre todas las cosas se ve reflejado el amor, cuidado y dedicación puesto hasta en los más pequeños detalles, que hacen del tour, además de didáctico, también placentero.

Placer que luego se extiende al momento de probar los vinos en la degustación conducida por Isabella Calcagno Zubizarreta, sommelière de la familia y una de las impulsoras que llevó a crear los nuevos vinos TOP de la casa elaboradora: ALTA GAMA (así el nombre de las dos primeras etiquetas de esta línea - un Marselán y un Tannat - a los que se irán sumando nuevas propuestas). Tintos que con una expresión auténtica del terruño, aliada a una moderna elaboración que incluye la crianza en barricas nuevas de roble durante 12 meses, aportando complejidad, deja a cualquier consumidor de boca abierta.... claro, de boca abierta y esperando más vino!

Ya es cerca de las 13 hs. y estamos llegando a Colonia Estrella, una zona suburbana de Carmelo donde las viñas son reinas y señoras, algunas inclusive de cierta edad. La previa reserva telefónica para almorzar en El Quincho Restaurante & Wines ayuda a que nuestro apetito se abra, más que nada por ya conocer el lugar de anteriores experiencias. La carta, que va más allá de platos muy bien logrados, incluye además algunos tragos de autor, y una excelente propuesta dada por la marca propia de vinos - la línea Q - que de momento elaboran en una bodega cercana, y a partir de la vendimia 2023 comenzarán a vinificar bajo techo propio.

El amable equipo de salón - comandado por el experimentado Ramiro Guimaraens - nos comenta las sugerencias del día, y claro, ni lentos, y menos perezosos, nos decidimos bien rápido a ordenar. ¿Qué mejor que una copa del Q Chardonnay / Viognier para acompañar las croquetas de humita con salsa romesco, y las tarteletitas de pollo, apio y nuez? Más adelante llega a nuestra mesa - con vista privilegiada para el viñedo al frente del salón principal - la bondiola de cerdo braseada acompañada por la polenta cremosa, que optamos por "maridar" (defecto profesional, vio?) con el elegante y amable Q Tannat Reserva. Mi compañera de viaje optó por los sptäzle de papa y espinaca con ragú de vegetales y panceta, que fueron muy bien acompañados del riquísimo Q Marselán, un tinto de esos que enamora a cualquiera, y a primera vista.... o debería decir, a primera copa.

Aquello de "panza llena, corazón contento" debe de ser verdad, porque de tan satisfechos nos quedaron "para la próxima" los postres a los que habíamos echado un ojo en la carta: affogato italiano y flan con dulce de leche. Bien dicen por ahí que hay que tener una excusa para volver, verdad?

Luego de toda esta "movida" se imponía un tiempo de descanso, y nada más reparador que tener que recorrer los tan solo 1.200 metros que unen el lugar de almuerzo con el del alojamiento: la Posada Campotinto, donde la eficiente y servicial Véronique nos aguardaba para el check-in de nuestra confortable suite. Amplia, luminosa, de estilo funcional y moderno, equipada con lindo mobiliario, al que se suma la tecnología para una óptima estadía (minibar, aire acondicionado, calefacción, wi-fi, smart TV con recepción satelital y plataformas de streaming) y claro, baño completo, la habitación cuenta con todo lo necesario para que el tiempo de estancia sea sumamente placentero.

Rodeada de frondosos arboles - en medio de cuidados jardines - con piscina exterior (que funciona durante los meses cálidos) y con las viñas, principalmente de Tannat y Moscatel de Hamburgo a solo unos pasos, el establecimiento eno-gastro-hotelero se complementa con un restaurante de estilo italiano donde sirven desayuno, almuerzo y cena. Allí se puede optar por los vinos elaborados en la bodega propia, entre los que se destacan el blanco de Viognier, diferentes blends y varias versiones de Tannat con la marca Campotinto, además de otras etiquetas como las elaboradas con uvas procedentes del proyecto inmobiliario La Concordia, el primer barrio de viñas de Uruguay, que da vida a creaciones de partidas limitadas.

Imperdible la visita a la bodega (que incluyen en el paquete de hospedaje y recibe a visitantes en general) en donde es común encontrarse con el enólogo Daniel Cis, conocido en Carmelo y su zona de influencia por desarrollar un más que interesante trabajo de asesoría, desarrollo y elaboración de vinos. Allí la visita guiada está a cargo del hiperactivo Juan José "Pepe" Sobot, que como estudiante de sommelier no esconde su pasión y dedicación al servicio del vino, algo que se nota a la hora de plantear la degustación a los visitantes.

(lea la segunda parte del artículo aquí)

Algunos datos útiles....

Bodega Zubizarreta - Contacto al +598 99 280 284 - Instagram.com/bodegazubizarreta

El Quincho - Info-reservas al +598 92 641 652 - Instagram.com/elquincho_coloniaestrella

Posada y Bodega Campotinto - Contacto al +598 4542 7744 - Instagram.com/campotinto

Texto: Sommelier Daniel Arraspide

Fotos: Andrea Fontes, D. Arraspide, Divulgación